Imagínense en una playa de la zona sur de Costa Rica. Amanece. La noche ha sido larga y cargada de muchos sonidos, ritmo, baile, fiesta… Y no acaba la experiencia.
Es hora de recibir el sol. De darle la bienvenida al nuevo día. Empieza a sonar Random Rab, y todo empieza a cobrar sentido.
Nos vamos adentrando con las primeras luces, con los degradados del amanecer en un ritmo diferente. No es un ritmo solo para terminar una larga noche ni solo para empezar un nuevo día. Es un ritmo para darle valor a los momentos de esa noche.
No son noches en un club o entre bares. Es una noche entre música, nuevos y viejos amigos.
Entre el ritmo y la fresca mañana, se mezclan sonidos orgánicos de violines, guitarras, percusión y voces que nos invitan a volver a poner a volar los sentidos.
Escuchar este disco me lleva a una de esos amaneceres iniciando el día con un set de Random Rab. O por lo menos me transporta a uno de esos amaneceres.
Si lo quieren entender mejor, no se lo pierdan en Envision 2014.
Calificación: coleccionable.
Nota por Natalio Villanueva Vargas.
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Recomendación de la semana: Random Rab
